Alan Paul Medina
-REFLEXIÓN FINAL-
Desde un principio le puse mucha expectativa al trabajo, aunque es difícil conocer a una persona desde cero y saber que decir de ella, me paso totalmente lo contrario. Mi compañero es una persona super abierta, con la que pude trabajar sin ningún tipo de problema. Cuando apenas lo conocí lo primero que se me vino a la mente fue el color, por su forma de expresarse y la alegría que me transmitió. Comencé experimentando con la pintura sobre el retrato, tanto en photoshop como en una copia de una fotografía, tome para ello de referente a Ouka Lelee. Probé varias cosas con las que quería experimentar. Después de varias charlas fui encontrando distintas características en Alan, cosas en las cuales me sentía identificada. Por lo que decidí trabajar finalmente, no sólo con el color, sino también con esa identificación y además con la obsesión, en su caso por los objetos analógicos, aunque podría haber tomado muchas otras cosas sobre su personalidad que me llamaron la atención decidí quedarme con estas tres, que se relacionaban bastante bien. Al mismo tiempo no quise forzar las fotos, me gustó jugar un poco con la naturalidad y el ver que hace el otro frente a la cámara, ya que el retrato no es sólo la mirada de uno, sino también lo que el otro nos proporciona. Me resultó un trabajo muy divertido, en el que aprendí mucho.
En cuanto al formato de entrega decidí mantener el recorte original en la foto, ya que había experimentado en hacerlo en 30x30, pero no terminó de convencerme. Por otro lado la utilización del newhive me pareció muy interesante, por que pude explotar un poco más esto que quise enfatizar, tomé para ello de referente a Nam June Paik, en la repetición de pantallas. Lo único que no me gustó del soporte es la forma en la que se traba, tuve que hacer más de una vez el trabajo y eso me limitó a seguir experimentando.
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